Los Hechizos de Morgana Campanar

Por fin conseguí reservar una mesa, labor ardua tras el incuestionable éxito de esta cadena de restaurantes donde el lleno está asegurado. La mesa era para las 15:15, pero hubo que esperar a que los anteriores se fueran, por lo que empezamos a comer casi a las cuatro.

Amable servicio, pero van a tope, y una decoración necesitada de una urgente renovación, hace años estuve en el restaurante oriental que allí estaba y siguen sus elementos, seguro que tras el éxito no encuentran motivo para hacer reformas.

Lo mejor es que la bebida es a demanda y entra en los alrededor de quince euros del menú, y los variados entrantes más el arroz de rochos que estaba de muerte.