cada vez peor
He sido cliente habitual de este mesón desde que abrió sus puertas y he sido testigo de como ha ido empeorando la cantidad, calidad y precio, además de otras cosas que considero importantes como es el trato al cliente. En particular el comportamiento y trato de su gerente Victorino Galilea Cordón un maleducado e impertinente. Yo desde luego no volveré y por lo que he podido leer en algunas de estas opiniones no seré el único. Hay muchos sitios en Logroño donde no solo dan bien de comer, sino que tratan al cliente una fórmula que no es tan difícil de aplicar.