A este lugar sagrado, sólo podían acceder el Huey Tlatoani quien era el gobernante supremo y la élite militar mexicana de más alto rango, para realizar y observar la ceremonia de graduación militar del guerrero águila.
Tienes que tener condición para subir, ya que consta de varios escalones muy angostos, pero vale la pena el esfuerzo, la vista es espectacular.
Es un lugar mágico con sonidos extraños salientes de las grietas de las montañas rocosas, se siente una gran energía rodeado de hermosos paisajes y un pueblo mágico.
Uno de mis lugares favoritos para relajarme la zona ofrece ruinas arqueológicas hermosas e increíbles paisajes, con escaleras para llegar a ella un poco cansado para los que somos poco atléticos pero vale la pena, con vegetación.
