Hotel situado a solo 20 minutos de Granada y que se encuentra a las faldas de sierra Nevada, cerca de Conchar. Muy buen hotel, con un diseño pensado con muy buen gusto. Las habitaciones son muy amplias, el baño integrado en la habitación tiene una amplia ducha y una bañera. El restaurante tiene muy buena calidad aunque no es barato. Tienen bodega propia aunque cuesta 12 euros la visita. El personal de recepción es muy amable. Sin duda alguna repetiría.
Impresiona descubrir tan cerca de Granada un hotel muy moderno en un entorno precioso rodeado de viñas.
El descanso en la habitación es buenísimo y se enriquece con una cocina espectacular, un buen vino (los probé todos), la oportunidad de conocer la bodega por dentro con una visita guiada y la posibilidad, como hicimos nosotros, de no parar con muchas actividades: piscina, partidito de ping pong, paseo entre las viñas con bicis que te presta el hotel, tarde de paint ball que está muy cerca. Nos faltó aprovechar el picadero de caballos que tienen.
Muy recomendable.