Las 15 mejores cosas que ver en Buda

Construido a lo largo de las colinas que dominan el Danubio, Buda es el corazón imperial de Budapest y su distrito más elegante y monumental. A continuación te mostramos los 15 mejores rincones que visitar en Buda, para que descubras los impresionantes miradores y laberintos subterráneos del barrio y sus monumentos más famosos.

Buda, el barrio en la orilla occidental del Danubio, está dominado por el imponente Castillo de Buda, un enorme edificio que ha desempeñado un papel clave en la historia de la ciudad, desde la defensa contra los invasores mongoles y turcos hasta las batallas de la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, el Castillo de Buda no es un castillo en el sentido tradicional, sino una serie de muros, plazas, patios y palacios barrocos construidos en varias épocas de la historia. Hoy en día, el complejo alberga museos como el Museo de Historia de Budapest o la Galería Nacional Húngara que, sinceramente, no son imprescindibles a menos que te apasionen el arte y la historia húngaros. Más bien, las mejores cosas que ver en el Castillo de Buda son los numerosos jardines y miradores que rodean el castillo, que ofrecen unas vistas impresionantes de la ciudad y del emblemático Parlamento húngaro.

Más allá del castillo, el Barrio del Castillo también alberga algunos de los rincones más hermosos de la ciudad. Entre sus casas medievales y calles empedradas, encontrarás la espectacular Iglesia de Matías, una de las más impresionantes de toda Europa. Esta iglesia del siglo XI destaca por su rica decoración, con los coloridos azulejos del techo y la preciosa decoración interior con patrones florales y diseños geométricos de colores dorados y azules. Cerca de allí, también encontrarás el Bastión de los Pescadores, quizás el mejor mirador de la ciudad. Desde sus torres y galerías, tendrás unas vistas impresionantes sobre el Danubio y las calles de Pest.

Sorprendentemente, muchas de las mejores cosas que hacer en Buda no están ubicadas en la cima de sus colinas, ¡sino dentro de ellas! Una de ellas es el Laberinto del Castillo de Buda, un vasto complejo de túneles subterráneos, cuyas galerías han encerrado a prisioneros de la talla de Vlad el Empalador. Otra de las maravillas subterráneas del barrio es el Museo Hospital en la Roca, un hospital y búnker nuclear construido durante la Segunda Guerra Mundial, donde podrás ver las herramientas y equipos médicos originales utilizados para tratar a los soldados durante la invasión soviética de la ciudad en 1945. Si te apetece un plan más romántico y tranquilo, opta por una cata de vinos en Faust Wine Cellar, un encantador bar de vinos ubicado en una cueva, donde podrás degustar algunos de los famosos vinos blancos de Hungría.

Abandonando la zona del castillo, las orillas del Danubio en Buda también albergan muchos de los baños termales más populares de Budapest. El más famoso es, sin duda, el Balneario Gellert, cuyas aguas medicinales y decoración Art Noveau lo convierten en uno de los baños más hermosos de la ciudad. A un corto paseo por las orillas del Danubio también encontrarás los Baños Rudas, un baño turco del siglo XVI, que tiene una increíble piscina principal coronada por una hermosa cúpula otomana. Más al norte, se encuentran los baños más antiguos de la ciudad, los Baños Kiraly, cuya tenue iluminación y arquitectura de la época otomana te transportarán a la época de los sultanes.

Si vas a visitar Buda tienes que subir a la Colina Gellert, ubicada a los pies del Puente Elisabeth. Este hermoso parque está coronado por la Ciudadela, una fortaleza histórica donde podrás admirar la famosa Estatua de la Libertad y disfrutar de una de las vistas más impresionantes de la ciudad. En la base de la colina, encontrarás otra de las curiosas joyas subterráneas de Buda: la Iglesia Rupestre de Budapest, una iglesia y un monasterio construidos en la misma roca de la colina.

Por último, si tu estancia en la ciudad dura varios días, vale la pena alejarte un poco de las orillas del Danubio para descubrir algunas de las atracciones menos conocidas de Buda. En las ruinas romanas de Aquincum, ubicadas en el antiguo barrio de Óbuda, conocerás como fueron los orígenes de la ciudad, mientras que en el Cementerio de Farkasrét admirarás las hermosas esculturas que adornan las tumbas de muchos de los artistas, políticos y científicos más famosos de Hungría. Por otro lado, si te apetece vivir una experiencia diferente y emocionante, la Cueva de Pálvölgyi te ofrece la oportunidad única de hacer espeleología entre espectaculares formaciones de piedra caliza en pleno corazón de una gran capital europea.