15 preciosos pueblos cerca de Burdeos

Dotado de un paisaje medieval de viñedos que resguardan alrededor de 2000 años de historia, Saint-Émilion es uno de los destinos más históricos que ver cerca de Burdeos si te consideras un amante del vino y sus bondades. Se trata de un pueblo sobre colinas adornado por la piedra caliza y que hace gala de una amplia diversidad de vinos. Entre sus calles estrechas puedes encontrar edificaciones talladas en la piedra como la iglesia monolítica de Saint-Émilion, o disfrutar de su diversidad geológica. No por nada sus terrenos fueron declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La pequeña ciudad también ofrece una experiencia culinaria de lo más típica, por lo que puedes acompañar tu copa con un exquisito queso de cabra y macarons. Seguro te encantará realizar un tour por Saint-Émilion y Burdeos para nutrirte de su historia.

El pueblo de Sarlat-la-Canéda es un deleite para los apasionados por la arquitectura. ¡Verás monumentos históricos hasta donde te alcance la vista! Las calles pavimentadas de la capital del Perigord Noir te encaminan hacia conjuntos medievales protegidos por la nación para conservar su autenticidad arquitectónica, como la fuente de Sainte Marie o la torre del Bourreau. También es un sitio idóneo que ver en Burdeos para dejarse mimar por sus tradiciones gastronómicas que incluyen trufas, pasteles y una fina charcutería. Además, es posible que sus paisajes urbanos te parezcan conocidos, pues han sido los escenarios de numerosas películas francesas como “Le Tatoué” de 1968 o “Les Misérables” de 1982. En conclusión, una escapada ideal para seguidores del cine clásico francés.

En las adyacencias del río Dronne, se encuentra uno de los pueblos bonitos cerca de Burdeos más cautivadores de la región de Poitou-Charentes. Sus casas de piedra, adornadas con tejados de colores cálidos, aportan una fachada pintoresca a la población, la cual se jacta de contar con el templo monolítico subterráneo más alto en toda Francia, la iglesia de Saint-Jean. Una obra arquitectónica de los monjes benedictinos del siglo XII. Además, dada su cercanía con el río, resulta un destino común para el descanso y practicar deportes acuáticos como el piragüismo. Aubeterre-sur-Dronne es un poblado pequeño, de apenas 2,39 km², por lo que puedes hacerle una visita rápida durante un paseo de fin de semana en Burdeos.

Ubicado en la comunidad de Gironda. A 100 kilómetros de Burdeos se encuentran las calles de Sainte-Foy-la-Grande; un pueblo que arropa los vestigios de sus murallas medievales y da paso a majestuosas edificaciones como el castillo de Montaigne. Sus callejuelas empedradas te brindan un recorrido a través de las casas entramadas de madera que datan de los siglos XV y XVI. Asimismo, los sábados en la mañana puedes encaminarte hacia un mercado local de agricultores para deleitarte del fruto de sus cosechas. También puedes dirigirte hacia el Dordoña; río que bordea a la población y donde se puede practicar piragüismo, pesca o participar en catas de vino durante las celebraciones de agosto. Festividades que vale la pena presenciar para empaparse de sus tradiciones.

La ciudadela de Blaye, obra del Señor de Vauban; Sébastien Le Prestre, es un poblado ubicado en Gironda compuesto por múltiples fortificaciones y unas 38 hectáreas de murallas que le rodean. Desde el 2008 es catalogada como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. En otrora, fue una ciudad estratégica dispuesta para proteger a Burdeos y controlar así el acceso a su puerto. En la actualidad, resulta una visita obligada para los amantes de las construcciones militares, mazmorras, fosas y castillos. Si buscas actividades más cotidianas, te alegrará saber que puedes visitar los mercados típicos, hacer catas en sus más de 100 bodegas o pasearte por los viñedos de la zona o descansar en sus costas.

Considerado como uno de los lugares más coquetos de Francia, Pujols; ubicado en la cima del Villeneuve-sur-Lot, es uno de esos pueblos medievales cerca de Burdeos que resaltan por sus encantos urbanísticos. En este poblado de la región de Nueva Aquitania, con casas de piedra y caminos floreados, podrás pasear a través de su mercado cubierto y disfrutar de sus productos regionales. También puedes adentrarte más a sus entornos históricos y visitar edificaciones como la iglesia de Sainte Foy-la-Jeune o la iglesia de Saint-Nicolas de Pujols, ubicadas a más 180 metros de altura sobre el nivel del mar y desde donde se tienen maravillosas vistas de los valles del Lot.

El pueblo de Arcachon es una localidad ubicada a en la cuenca de Arcachon, a unos 60 kilómetros del suroeste de Burdeos. Se trata de un lugar privilegiado pues, además de su famosa Bassin d’Arcachon, alberga numerosas villas del siglo XIX y calles comerciales con restaurantes y cafés al aire libre. Es aquí donde puedes encontrar que hacer en Burdeos mientras estás de vacaciones, como visitar la ostentosa ciudad de invierno; relajarte en la playa de Arcachon en la ciudad de verano; recibir sesiones de talasoterapia en la ciudad de primavera; o practicar vela, kitesurf y otros deportes en la ciudad de otoño. Una experiencia que denota lo mejor de Burdeos y sus cercanías.

Localizado en una península entre el océano Atlántico y la cuenca de Arcachon, se ubica el pueblo de Lège-Cap-Ferret. Tierra de encanto bañada por la brisa marina y atractivos turísticos que visitar en Burdeos y sus aledaños durante el verano. En este territorio puedes visitar entornos veraniegos como la playa Garonne o la playa del Faro. Asimismo, encontrarás bellos contrastes arquitectónicos entre sus lujosas villas y sus pueblos ostrícolas como Piraillan, pero todos igualmente arropados por la grandeza de Cap Ferret. Y si buscas obtener las mejores vistas de la península, tienes la opción de visitar el faro de Cap Ferret o subirte en el tren para pasear a través de las dunas.

¿Te gusta el veraneo, la playa y disfrutar de bonitos ambientes naturales con tu familia? Pues eso, y mucho más, lo puedes encontrar en el pueblo de Hourtin. Esta localidad del departamento de Gironda en Nueva Aquitania, es un paraíso vacacional donde abundan los deportes acuáticos, terrestres, las caminatas y los paseos en bicicleta. Es común encontrarse con mercados gastronómicos o mercados nocturnos artesanales mientras caminas por sus calles. Y si pasas por el lago de Hourtin, podrás encontrar a los estudiantes de la academia internacional de música Hourtin Médoc ensayar con sus instrumentos y dejarte llevar por sus melodías.

A unos 50 kilómetros de Burdeos, se encuentra el precioso pueblo de Carcans. Un ambiente tranquilo en el departamento de Gironda rodeado por el espeso bosque de Landes y bordeado por el lago de Hourtin y Carcans, y el océano atlántico. En esta comuna francesa abundan las actividades deportivas y el entretenimiento. En las diversas playas de Carcans podrás encontrar prácticas de kitesurf, bodyboard, windsurf, catamarán, piragüismo, ¡Incluso esquí acuático! Además, también es un lugar excelente para el ciclismo, escaladas y más. Aunque si prefieres recorrer sus curiosos rincones, también puedes visitar el museo de Artes y Tradiciones Populares.

Cerca de la costa atlántica se alza sobre la tierra el pueblo de Lacanau, una localidad de arena blanca y fina, que se caracteriza por su ambiente festivo ideal para vacacionar. Aquí se ubican algunas de las playas más bonitas de la región, como el centro balneario Lacanau-Océan, o la playa de Lacanau. La brisa marina y el sol invitan a los viajeros a formar parte de los múltiples deportes acuáticos, entre los cuales impera el surf. Además, también puedes aventurarte en bicicleta y hacer senderismo hacia el bosque de pinos y su belleza salvaje. En Lacanau también se llevan a cabo numerosos torneos y festivales de surf y esquí acuático.

Ubicado en el distrito de Burdeos, en el departamento de Gironda, se encuentra el pueblo de Le Porge. En la lengua gascona, su nombre significa “Puerta” y tiene una reputación como poblado naturalista desde 1980. El lugar es una visita obligada para los amantes del estilo de vida naturalista. Aquí puedes llevar a cabo numerosas actividades al aire libre, ideales para niños y adultos interactúen con el ambiente. La playa de Le Porge – Océan se abre hacia el océano atlántico e incluso hay un espacio para el nudismo. En el resto de sus costas, puedes practicar natación o surf. Aunque también te puedes inscribir en la escuela de equitación, realizar paseos en bicicleta o disfrutar de los mejores jardines y parques de Burdeos en el proceso.

En pleno corazón del Valle del Lot, se encuentra el pequeño poblado de Castelmoron-sur-lot en Gironda. Una de las tantas localidades pintorescas que ver en los alrededores de Burdeos, dotada de un encanto natural inigualable. El pueblo solía ser un pantano que empezó a crecer durante la Edad Media, y no fue sino hasta finales de los XVIII y XIX que se convirtió en un punto económico para la región. Dispone de casas rústicas y edificaciones como la iglesia de Castelmoron-sur-lot. Es una zona diáfana, donde se respira tranquilidad y donde se puede pasar el día curioseando sus pequeños comercios o practicando actividades acuáticas.

Con una extensión de más de 13000 hectáreas de bosques y unas 3200 hectáreas de masa de agua, el pueblo de Biscarrosse es un destino ideal para darse una escapada por Burdeos y alrededores. El territorio, ubicado a unos cuantos kilómetros de la bahía de Arcachon, ofrece una mirada espléndida de biomas diversos como playas de arena fina bañadas por las aguas del atlántico, el lago de Biscarrosse y pinares que se alzan entre valles y los jardines de la duna. Algunos sitios de interés en la localidad son su museo de la Hidroaviación, el cautivador mercado nocturno y la iglesia fortificada de Saint-Martin. Para los más pequeños cuenta con un parque de aventuras y los más adultos pueden tomarse el día para ver la plaza Dafau, jugar golf, hacer senderismo, surf o montar a caballo.

Eymet es uno de los pueblos cercanos a Burdeos que puedes visitar para conocer un poco más de las tradiciones del departamento de Dordoña. En sus alrededores puedes encontrar casas entramadas de madera, comercios y restaurantes. Se trata de una población tranquila, donde puedes tomar un descanso mientras preparas el itinerario de los siguientes días. Si te encuentras en Eymet, procura visitar la Bastide d’Eymet o el viejo molino en el Dropt a Eymet. Aunque si visitas esta pequeña aldea en fechas festivas, es probable que consigas mercados nocturnos, festivales culturales, la celebración de la ostra y el vino y algunas ventas de garaje.